Paco Pérez16.01.2019. Redacción | Opinión
Por: Paco Pérez
pacopego@hotmail.com
Si los meteorólogos no se han equivocado en sus cálculos, se prevé que este jueves caigan los primeros copos de nieve en las cumbres de Tenerife, debido a la presencia de una bolsa de aire frío en altura, que por lo visto descargará bastante agua sobre las Islas Canarias.
A pesar de los avances técnicos en las predicciones, nunca me fío al cien por cien de nuestros meteorólogos y de determinados satélites que andan dando vuelta a la Tierra y que lo fotografían todo, pero que se equivocan muchas veces, porque sin aparatos hechos por el hombre, y el ser humano es imperfecto.
Me fío más de los augurios de los magos de nuestro campo y de los pescadores de nuestras costas, que saben mucho más del tiempo que nos espera que los estudiosos del clima, porque basan sus cálculos en la propia experiencia y, por determinados comportamientos del cielo y del mar conocen a la perfección si habrá tormenta, si lucirá el sol o habrá nubes en los próximos días.
El otro día alguien me dijo que le estaba picando el trasero y, sin dudarlo, le auguré que llovería en los próximos días, algo que aprendí cuando era un niño, porque parece que los gusanitos que tenemos en el colon y en el recto se ponen nerviosos, revolotean en nuestro culito y nos avisan de las lluvias. Como cuando los gatos y los perros, y otros seres vivos, predicen la inminente llegada de un terremoto.
Sea como sea, Tenerife y las Islas agradecen siempre las primeras lluvias de cada año y más si son en forma de nieve en las cumbres de Nivaria (de ahí su nombre) y de La Palma, porque esos copos se filtran en la tierra y nos abastecen del líquido elemento, aparte de que el Teide nevado ofrece unas imágenes siempre sorprendentes, agradables y maravillosas, únicas en el Mundo mundial.
Imagen de archivo: laopinion.es | CEDIDA
