Paco Pérez28.12.2018. Redacción | Opinión
Por: Paco Pérez
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Aunque parezca increíble, el pasado día 21 de diciembre, poco antes de la medianoche en Canarias, comenzó el invierno 2018-19, algo que sólo ocurre en este archipiélago subtropical, porque estos últimos días hemos tenido un auténtico veranillo, con calima (polvo en suspensión en la atmósfera, procedente del desierto del Sáhara), con altas temperaturas en todas las Islas para la época del año en que estamos, con lo que no es desacertado decir que Tenerife es una eterna primavera, como afirmaba aquella canción del Festival del Atlántico, en los años sesenta del pasado siglo, en la que se aseguraba que aquí teníamos seguro de sol.
Pues sí, aunque muchos no lo crean ya estamos en invierno, estación que se prolongará en esta ocasión casi ochenta y nueve días (concretamente 88 días y 23 horas), finalizando el próximo 20 de marzo de 2019, día en que dará comienzo, como es lógico y más que previsible, la primavera.
El inicio de las estaciones naturales del año viene dado por aquellos instantes en que la Tierra se encuentra en unas determinadas posiciones en su órbita alrededor del Sol. En invierno esa posición es en la que el Sol alcanza su posición más austral, y es cuando se produce el llamado solsticio de invierno, si bien en el Hemisferio Sur se inicia el verano.
Durante esta nueva estación que comienza ahora, el Ministerio de Fomento, de quien depende el Instituto Geográfico Nacional, ha informado que el día en que el Sol sale más tarde será el próximo 5 de enero. El próximo ocho de diciembre será la jornada en la que nuestro astro se pondrá más pronto.
Por otra parte, el próximo día 3 será la fecha anual en la que el Sol y la Tierra estén más cerca entre sí (unos 147 millones de kilómetros). El 5 de julio será el día en que más alejados estén nuestro planeta y la estrella de nuestro sistema solar, unos cinco millones de kilómetros más que estos días.
Imagen de archivo rtvc.es / CEDIDA
