16.08.2018. Redacción - Opinión
Por: Sonia Rodríguez Acosta
Coach
Todos hemos sentido alguna vez, esa sensación de bienestar al estar junto al mar. Parece que el tiempo se detiene y nos invade una cálida brisa de relax que impregna todo nuestro cuerpo y mente. Múltiples estudios han revelado que el mar tiene muchos beneficios terapéuticos.
El mar ejerce un efecto maravilloso sobre nuestro cerebro, esto es lo que piensan los neurocientíficos, dando así explicación a esa sensación de bienestar que nos produce estar cerca del mar.
Vivimos en una sociedad en la que nuestro cerebro esta sobrecargado de estímulos produciéndonos estrés por el día a día que llevamos. Sin embargo ver el mar y escuchar el sonido de las olas nos permite desconectarnos. De hecho, el movimiento del mar y su inmensidad tienen un efecto casi hipnótico, el cual genera esa sensación de tranquilidad y bienestar que nos permite recargar energía.
Las personas que tenemos la suerte de vivir cerca del mar, no deberíamos dejar pasar la ocasión de visitarlo a menudo y así disfrutar de sus beneficios.
No es de extrañar que el mar induzca a un estado meditativo, y que este sonido se utilice muchas veces en las sesiones de relajación. Puesto que este sonido produce cambios en las ondas cerebrales. Promoviendo las ondas alfas, que se han vinculado con un estado de atención sin esfuerzo. Estas ondas aparecen cuando estamos relajados y tranquilos. Todo a nuestro alrededor desaparece y nos ayuda a desconectar. Por todo ello nuestra claridad mental es mayor y aumenta nuestra creatividad.
¡Si has leído bien¡ nuestra creatividad se ve potenciada cerca del mar. Esto pasa porque nuestro cerebro cambia de estado “ocupado” a “relajado” lo que activa la red neuronal que está vinculada a las ideas más originales y creativas.
La inmensidad del mar hace que nos sintamos asombrados y admirados ante ella, lo que produce una profunda sensación de bienestar, haciendo que se pare el tiempo. Los iones negativos que desprende el mar tienen un efecto positivo en nuestro cerebro, ya que estimula la producción de serotonina lo que hace que nos sintamos más relajados, alegres y llenos de energía. Además por si fuera poco mejora nuestro desempeño cognitivo.
Como suelo decir habitualmente el mar lo cura todo,, mejora tu salud física y mental, da rienda suelta a tu creatividad, te relaja y hace que seas más feliz.
Ir al mar nos hace más felices y lo que te hace feliz, hay que aumentar la dosis. La playa es un espacio donde puedes disfrutar con amigos, familia o simplemente disfrutando de tu propia compañía, dejándote envolver por la magia del mar y sus numerosos beneficios. En verano es más habitual ir a la playa, bañarnos en sus aguas y nutrirnos de ellas. Los canarios llevamos el salitre en las venas puesto que estamos rodeados de mar que baña todas nuestras islas. Un paraíso sin igual que hace de nuestras islas un entorno único, con razón se conoce como las islas afortunadas rodeadas de oro azul.
El mar una fuente inigualable de energía positiva, nutre cuerpo y mente y alimenta el alma. para mí el mar es vida, nadar poder ver el mundo desde ese azul cielo. Pasear por la arena sintiendo el cálido abrazo de la ola que se funde con la arena. Si lo miras bien el mar es amor porque alimenta de alguna manera tu corazón.
EL MAR ME INSPIRA A AMAR
ME INSPIRA A SOÑAR
ME DA ALAS PARA VOLAR.