16.09.2019 | Redacción | Opinión
Por: Sonia Rodríguez Acosta
Coach
Vivimos en un planeta llamado tierra lleno de seres vivos, es curioso, precisamente ese que es nuestro hogar. Somos precisamente los seres humanos los mismos que nos lo estamos cargando. Cargando de malas energías, violencia, basura etc… somos seres racionales por lo tanto tenemos la capacidad de discernir lo que conviene o no al planeta. Cuidemos de él, llenándolo de amor y conciencia. Cada uno por su parte podemos hacer tanto, porque un granito de arena de cada uno hace una montaña. Una montaña de beneficio global para nuestro hogar. Imagínate por un momento tu casa. ¿La tendrías llena de basura y mal cuidada? Si tu respuesta es negativa extrapólalo a tu otro hogar que es el mundo mismo. Un mundo que cada vez más se está viendo afectado por las acciones que sobre él los humanos hemos estado haciendo a lo largo de los siglos. Unos siglos que pesan sobre el planeta como una losa pesada que va hundiendo nuestro mundo y a nosotros con él. Ahora ya no podemos remediar el pasado, pero si podemos cambiar el presente y futuro de la tierra. La tierra es un planeta vivo en continuo movimiento, movamos el mundo para que gire mejor.
Recicla, es una manera fácil y muy útil de cuidarlo, a la mano de todos tenemos contenedores para vidrio, cartón, plástico etc….el agua es un bien que hay que cuidar, ahorrarla es beneficioso para todos. Yo cuando me ducho cierro la llave mientas me enjabono, es una manera fácil de contribuir a su ahorro. Está al alcance de todos y cada gota ahorrada es una semilla de amor que entregamos al planeta. Todos salimos beneficiados, porque el planeta es de todos. Cada semilla sembrada se cosechara en su momento. Es el momento ahora de actuar de ser valientes y de luchar con balas de amor hacia nuestro planeta tierra. Es un placer ver zonas verdes, aguas limpias y cristalinas., está en tu mano, no lo dejes para mañana empieza hoy. Cuidar del planeta es tarea de todos. Ver como la amazona se quema, es algo horrible, hasta donde ha llegado la crueldad del hombre. Yo confío en un mundo mejor es posible, es posible porque hay gente realmente implicada, sin llegar a extremos radicales. Ya que los radicalismos no son buenos en ningún caso. El amor mueve el mundo, es precisamente eso lo que la tierra está reclamando a gritos. Movámonos en el amor. Un amor extensible que rodee la tierra de paz y de energías bonitas. Cosas que aporten, políticos que sumen y se dejen de guerras de egos sin sentido. Despertar conciencias y abrir la mente hacia un mundo mejor, yo creo firmemente que es posible y así sea por el bien de todos. Principalmente por el planeta tierra que es nuestro hogar. Donde habitamos y crecemos, donde crecen nuestros hijos viendo nuestras acciones, deja que ellas hablen por nosotros. La tierra sonreirá viendo un planeta sano lleno de gente feliz. Acuérdate que el amor es la cura a toda intolerancia, violencia y odio. Cuidemos nuestro hogar para que él nos cuide. La tierra pide amor, vamos a dárselo.