31.07.2019 | Tacoronte
La Concejalía de Hacienda del Ayuntamiento de Tacoronte presentará en el Pleno municipal que se celebrará este jueves, 1 de agosto, una propuesta de reconocimiento extrajudicial de crédito para hacer frente al pago de facturas pendientes de abonar, derivados de servicios y suministros correspondientes a los ejercicios anteriores.
Las deudas heredadas por el nuevo Gobierno municipal, conformado por PSOE, NC y Sí se Puede, ascienden a 580.756,09 euros, de los que casi la mitad de dicha cifra se corresponde las cantidades pendientes de abonar por los servicios prestados por la concesionaria del alumbrado municipal, apartado en el que en los últimos ejercicios, el Gobierno del nacionalista Álvaro Dávila dejó de ingresarle más de 290.300 euros, del total de casi 800.000 euros que se le adeuda.
En el expediente solicitado por el área de Hacienda, que dirige el socialista Carlos Medina, aparecen otras cantidades que no fueron satisfechas en diferentes apartados, y que se corresponden a cuantías de los años 2017 y 2018, como la gestión de los talleres municipales, que en las tres facturas pendientes de pago acumulan casi 70.000 euros.
En el capítulo de suministros, plantación y jardines, en tres facturas impagadas que se han detectado en los últimos ejercicios, se acumula una deuda superior a los 30.800 euros, mientras que por la limpieza de vías quedaron por pagar por parte del equipo que presidió Álvaro Dávila, 20.686 euros; 52.446 de mantenimiento de costa, y alrededor de 10.000 por el impago de facturas por el servicio de telefonía.
Otras cantidades sin abonar y que en la mayoría de los casos no superan la cifra de 1.000 euros, están relacionadas con servicios de carácter social, como son varios casos de ayudas a la escolarización, participación ciudadana o el servicio de teleasistencia.
El nuevo gobierno local también deberá hacer frente al pago de facturas por otros conceptos como suministro de carburantes, factura que supera los 20.000 euros; 10.000 euros por unas jornadas en materia de vino; los 1.041 euros por asistencia jurídica o los 6.420 por una auditoría, “cuyo fin desconocemos hasta la fecha”, indicó el titular de Hacienda, Carlos Medina.
Para actividades culturales, el impago del Gobierno de CC refleja 8.200 euros pendientes de abono, a los que se suman más de 10.000 en diferentes facturas por servicios y suministros sin especificar o una auditoría cuyo coste ascendió a 6.420 euros.
Entre las 67 facturas pendientes de abonar, aparecen otros apartados como el concurso de belenes, el servicio de socorrismo, con una deuda de casi 6.000 euros o un censo de animales que se le encargó al Colegio de Veterinarios que, al igual que el grueso de pagos pendientes, solo los podrá abonar el Ayuntamiento tras la aprobación de su reconocimiento por el nuevo consistorio en la sesión ordinaria del pleno.
El concejal de Hacienda, Carlos Medina, destacó que, en el expediente redactado por la Intervención, en el que se reconoce la deuda, “no obstante, se advierte que, de cara a ejercicios futuros, se articulen los mecanismos adecuados con las facturas y documentos dentro del ejercicio que corresponda, y no quebrar así, como ha ocurrido, el principio de anualidad presupuestaria”.
Añadió que en el pleno municipal también se abordará el grado de cumplimiento en los plazos de pagos a proveedores, apartado en el que, señaló “que día de hoy nos lo han dejado de media en 100 días aproximadamente ”.
En ese sentido, denunció que la situación en la que el nuevo Gobierno municipal se ha encontrado el Ayuntamiento “es caótica y esperpéntica”, hasta el punto de que reconoció que “vamos a tener muchas dificultades para poner en marcha algunos de nuestros proyectos, intentado normalizar la situación en la que CC ha dejado al consistorio”.
No obstante, anunció que, “una vez que se complete la dotación de funcionarios habilitados, se hará una valoración sobre la situación real, pues afirmó que, “tenemos la sensación de que se ha disfrazado”.
Fiestas, en números rojos
Medina afirmó que, lejos de la idea que han implantado desde el Gobierno nacionalista de que sus cuentas han estado saneadas, “cada día que pasa es un nuevo paso hacia la verdadera realidad. Ya no solo se les puede reprochar que han vuelto a dejar de ejecutar una cifra importante del Presupuesto de 2018, cercana a los 3 millones de euros, sino que también han dejado a los tacoronteros con la cuenta para el área de Fiestas en número rojos”.
En este sentido, el concejal de Hacienda señaló que “sin apenas llegar a la mitad del presente mandato, Álvaro Dávila, en su última etapa como alcalde, no solo no nos ha dejado ni un solo euro en la cuenta para fiestas, con un presupuesto prorrogado, sino que se ha gastado más de 150.000 euros más de lo previsto, dejando ese apartado en número rojos”.