20.12.2017. Madrid.
El senador de la Agrupación Herreña Independiente (CC-AHI), Pablo Rodríguez Cejas, ha planteado en el Senado un conjunto de medidas para desterrar la publicidad sexista y avanzar hacia la igualdad real entre hombres y mujeres.
En una moción registrada este lunes, el senador apuesta por la combinación de medidas de tipo normativo con otras de carácter educativo y de concienciación social, cuyos fines serían, entre otros, acabar con las conductas de dominación del hombre sobre la mujer y evitar la adopción de roles sexistas.
Rodríguez Cejas propone, en este sentido, la aplicación de una normativa que impida que los medios de comunicación, tanto impresos como audiovisuales, se lucren con la explotación sexual de las mujeres ofertando servicios sexuales en anuncios o publicidad.
De la misma manera, el senador herreño considera necesario impulsar, junto a la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ), un nuevo marco del Código de la Publicidad Infantil de Juguetes, “que explicite mucho más la necesidad de abordar la promoción de artículos infantiles desde una visión más igualitaria, que contribuya necesariamente a romper con los patrones de patriarcado y roles sexistas que han perdurado hasta nuestros días”.
A su juicio, resulta preocupante observar cómo en la publicidad de artículos infantiles, como los juguetes o la vestimenta, “se promociona la continuidad de una marcada diferenciación entre hombres y mujeres propio de otras épocas”.
“Por ejemplo -continúa- las niñas siguen siendo las protagonistas en los anuncios publicitarios que promocionan juguetes relacionados con las labores domésticas, mientras que los niños siguen siendo los que aparecen en aquellos anuncios relacionados con prácticas más violentas o con profesiones que requieren fuerza física”.
Esa situación se produce aun cuando el vigente Código recoge medidas correctoras, si bien precisa de mayor concreción.
El senador aboga también por la promoción de programas y recursos educativos adaptados a cada edad, en colaboración con las Administraciones autonómicas, encaminados a trabajar en la escuela y en los institutos la igualdad real entre hombres y mujeres en todos los ámbitos de nuestra vida.
En materia normativa, plantea la redefinición del concepto “violencia de género” en la Ley 7/2010, de 31 de marzo, General de la Comunicación Audiovisual, “entendiendo como violencia cualquier tipo de conducta que vaya encaminada a perpetuar la dominación del hombre sobre la mujer”.
De esta forma, se contribuiría a eliminar de la programación de los medios audiovisuales en España aquellos contenidos que no se ajusten al nuevo marco, independientemente de que se encuentren o no dentro de la franja horaria denominada de protección reforzada.
Asimismo, el senador plantea al Gobierno estatal que impulse campañas de sensibilización y educación sobre la igualdad real entre hombres y mujeres en todos los ámbitos y en todas las edades, en colaboración con las Comunidades autónomas.
Problema estructural. En la exposición de motivos de la moción, Rodríguez Cejas señala que “la violencia contra las mujeres no es un problema reciente ni focalizado en ningún ámbito concreto”, sino que “es un problema estructural que requiere de soluciones para ser combatido desde la raíz”.
“Asimismo, esta lacra dolorosa denota que aún se continúan perpetuando en muchas familias modelos de patriarcado, donde la desigualdad entre hombres y mujeres siembra lo que años más tarde se convierte en nuevos casos de violencia de género”, añade.
En este sentido, el senador estima que la explotación sexual de mujeres y niñas compone una de las más repudiables expresiones de violencia contra las mujeres.
“Carece de sentido –afirma- que en España se invierta, por un lado, en campañas publicitarias encaminadas a erradicar la violencia contra las mujeres y fomentar en la sociedad actitudes más igualitarias, cuando por el otro se continúa permitiendo que en la programación de los medios audiovisuales con más seguimiento en nuestro país existan programas que ponen en valor y promocionan precisamente todo lo contrario: la dominación del hombre sobre la mujer o la adopción de roles sexistas, e incluso violentos, en las relaciones de pareja, programas de televisión que, por otra parte, son seguidos por millones de adolescentes”.