08.06.2019 | Redacción | Opinión
Por: Rafael J. Lutzardo Hernández
Todos los periódicos nacionales se han hecho eco de un nuevo caso de presunta corrupción en el Fútbol español. En esta nueva ocasión, la Policía Nacional ha detenido a varios jugadores de Primera y Segunda División por participar presuntamente en una organización criminal dedicada al amaño de partidos de fútbol a través de las apuestas deportivas, según han informado fuentes policiales.
Sin duda, esta nueva acción antideportiva tiñe la buena imagen del Fútbol y del Deporte en general, donde la prioridad radica en predicar con ejemplo y transparencia, especialmente para las bases del Fútbol. Un ejemplo bochornoso e irreparable en la acción llevada a cabo por unos profesionales que en otra época tuvieron sus seguidores y admiradores. La ambición del poder y del dinero siguen dejando ciego a muchos dirigentes e intermediarios. Lo importante es que la lucha contra la corrupción en el Fútbol sigue sin detenerse ante una lacra corrupta que insiste en dejar el nombre del Deporte por los suelos.
Es por ello, según informa Servimedia, entre los futbolistas detenidos se encuentran Raúl Bravo, ex jugador del Real Madrid o Rayo Vallecano y supuesto cabecilla de la organización; Borja Fernández, jugador del Real Valladolid Club de Fútbol recientemente retirado; Carlos Aranda, ex jugador de varios equipos de Primera División; Samuel Saiz Alonso, jugador del Getafe, e Íñigo López Montaña, jugador del Deportivo de La Coruña y exjugador del Huesca. También han sido detenidos Agustín Lasaosa, presidente de la Sociedad Deportiva Huesca, y Juan Carlos Galindo Lanuza, jefe de los servicios médicos del mismo club.
A todos los detenidos se les imputa pertenencia a organización criminal, corrupción entre particulares y blanqueo de capitales. Los agentes se han desplegado a primera hora a la sede de la Sociedad Deportiva Huesca en la capital oscense como consecuencia de la trama, que puede afectar a más de un club. A todos los detenidos se les imputa pertenencia a organización criminal, corrupción entre particulares y blanqueo de capitales. La investigación la ha desarrollado la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV).
Una denuncia de La Liga en 2018 originó la operación. Precisamente, el origen de esta operación policial está en una denuncia de La Liga en mayo de 2018 a raíz de las presuntas irregularidades detectadas en el partido que disputaban el Huesca contra el Nástic de Tarragona y su relación con las apuestas deportivas de este encuentro. Esto solo tiene un nombre: golfos y corruptos