19.11.2017. Redacción / Opinión.
Por: Casimiro Curbelo
Presidente del Cabildo de La Gomera y Portavoz de ASG en el Parlamento de Canarias.
El futuro de La Gomera será verde, como su pasado y su presente, o no será. No cogeremos ningún camino que nos separe del desarrollo equilibrado en el que creemos. No apoyaremos ninguna ley que nos aparte del crecimiento sostenible que los gomeros queremos para nuestra Isla. No nos sumaremos a ninguna iniciativa que nos aleje de la apuesta medioambiental que venimos haciendo desde hace años.
Como hemos defendido en tantas ocasiones, la realidad gomera necesita soluciones diferentes que den respuesta a situaciones distintas. No cabe aplicar automática o miméticamente las fórmulas que se vienen llevando a cabo en otras Islas a una realidad que, como es el caso de la nuestra, tiene en su naturaleza, en sus paisajes y en la excelencia de sus propuestas su razón de ser.
Con estas convicciones, y atendiendo al compromiso que hemos adquirido con las mujeres y hombres de nuestra Isla, en Agrupación Socialista Gomera (ASG) hemos concluido que la filosofía que marca la Ley del Suelo encaja en el modelo sostenible y respetuoso con los entornos naturales que consideramos el único posible para nuestra realidad social, económica y medioambiental. En esa dirección, se ha definido un marco que en el caso del turismo y, especialmente, del alquiler vacacional, facilita la consolidación de una oferta singular y diferenciada, basada en la calidad del trato, la naturaleza, la gastronomía y las tradiciones culturales, como así se recoge en la Ley de Islas Verdes.
En este orden de cosas, cabe recordar el acierto con el que la citada Ley de Islas Verdes aborda el desarrollo de las islas no capitalinas y, en lo que a la ASG nos atañe más directamente, de La Gomera. No solo por las garantías que ofrece respecto al imprescindible cuidado del territorio sobre el que se deben impulsar las actividades económicas -necesarias para la generación de un empleo que debe incrementar su calidad-, sino también porque sienta las bases de un crecimiento social y demográfico razonable, inteligente y respetuoso. Y lo hacemos, y seguiremos haciéndolo, convencidos de que el desarrollo de La Gomera debe ser tan verde como su pasado o su presente, pero incrementando las oportunidades de trabajo y bienestar de quienes viven en la Isla.
El desarrollo económico de La Gomera será verde o no será porque ni la Isla puede permitirse otras fórmulas ni ASG lo permitiría allí donde contamos con presencia institucional. La Ley de Islas Verdes no va a cambiar el modelo de crecimiento de nuestra Isla, pero incidirá de forma directa en una mejora de las condiciones de vida de nuestras mujeres y hombres.
Ofrecemos una experiencia especial, excelente. Tenemos unas fortalezas que debemos mimar y atender. Estamos obligados a respetar los límites y la capacidad de desarrollo de nuestro territorio. Y todo esto está debidamente contemplado, entre otras protecciones, en una Ley que algunos no han entendido o no han querido entender, algo a lo que por otra parte estamos acostumbrados cuando las lecturas, interesadas, se hacen por parte de algunas voces que desde Gran Canaria o Tenerife hablan sin saber o sin conocer.
Lejos de las reticencias de algunos, las leyes que estamos apoyando suponen unas herramientas fundamentales para generar riqueza y empleo real a partir de una economía competitiva y adaptada a lo que los gomeros necesitan y merecen.
Como he señalado en otras ocasiones, en Agrupación Socialista Gomera queremos que nuestra Isla crezca pero no de cualquier manera. Solo nos interesa crecer si tenemos asegurado, como así es, que se preserva el medio ambiente y se activa la economía al ritmo y con las garantías necesarias.
Hacían falta cambios y se están llevando a cabo. Era necesario ofrecer a las Islas no capitalinas un marco específico y hemos contribuido a que así sea. Entendíamos que había que introducir reformas en las leyes ya existentes y hemos puesto nuestro grano de arena para que se pasara de las palabras a los hechos. Avanzamos en la dirección correcta.