23.09.2019 | Redacción | Opinión
Por: Sandra Rodríguez González
Portavoz del Grupo Municipal de Coalición Canaria - Partido Nacionalista Canario
Ayuntamiento de Puerto de la Cruz
“La caída de Thomas Cook lleva a Canarias a la peor crisis turística de este siglo.” (La Provincia), “Canarias, en alerta máxima ante la quiebra de Thomas Cook.” (Diario de Avisos), “La agencia de viajes Thomas Cook se declara en quiebra.” (Europapress), “Canarias se resiente del frenazo alemán” (El Día), “Temor de los hoteleros canarios a que estemos ante el peor escenario” (El Día), “La quiebra de Thomas Cook afecta a 30.000 turistas en Canarias” (La provincia).
Así despierta este lunes 23 de septiembre de 2019 la prensa y la realidad del turismo en Canarias. Sin duda un lunes negro que pasará a la historia del sector y que marcará un antes y un después, inevitablemente, en un sector clave para la economía de nuestra tierra y que sostiene nuestro PIB y que es directa o indirectamente, nuestro mayor generador de empleo y riqueza. No hace falta insistir en que para Puerto de la Cruz esta situación es alarmante y que no estamos exentos, en absoluto, de padecer las consecuencias.
A esta triste noticia que ocupa las portadas de toda la prensa local en todos sus formatos de difusión y que forma parte en esta mañana de la conversación de los ciudadanos en general y del sector en particular, hay que sumar otras incertidumbres que se ciernen sobre el sector como el cierre de las bases de Ryanair en nuestras islas, mientras que en Gerona, el Gobierno Catalán sí está siendo capaz de negociar y forzar que no suceda.
No olvidemos tampoco que la situación económica en toda la zona euro también está en la cuerda floja, con los tipos mantenidos a cero, el Banco Central Europeo tratando de frenar la caída reactivando la compra de deuda púbica, y con su presidente reconociendo que, a pesar de que no estamos ante una recesión, sí que se dan pasos en esa línea.
Tampoco son más halagüeñas las noticias sobre la situación por la que atraviesan las compañías aéreas Condor o Norwegian Airlines.
Si miramos hacia la economía nacional y la situación irresponsable a la que nos han llevado, obligando a convocar las cuartas Elecciones Generales en cuatro años, con la imagen deteriorada de la credibilidad del país y de la solidez de nuestra economía y de nuestro país en su conjunto, que se debería preparar, para afrontar los graves problemas económicos que ya incluso el Gobierno en funciones se ha atrevido a aventurar aunque sin olvidar que no le conviene hablar mucho del tema ni actuar, pues puede terminar teniendo un alto costo político en los próximos comicios del mes de noviembre a los que nos ha abocado el Presidente en funciones, tampoco aquí encontramos una salida ni una respuesta.
Ante este dantesco escenario que no deja mucho margen al optimismo, nos encontramos con el atronador silencio del Gobierno de Canarias y del Cabildo Insular de Tenerife a quienes lo único que se les ha ocurrido en estos cien días de gobierno es hablar de subidas de impuestos que ahoguen aún más a la ciudadanía y al sector económico y plantear la implantación de una tasa turística que vendría a grabar al turista visitante y que como ya el sector ha indicado, supondría un absoluto desastre, y nos costaría incluso empleos perdidos.
Olvida el Gobierno de Canarias que la financiación municipal tiene herramientas para corregir sus defectos en la propia legislación y que no sería necesario pensar en tasas turísticas si en el reparto de los fondos se tuviera en cuenta, para los municipios turísticos el sobre costo que esta condición tiene tanto en la prestación de los servicios como en el mantenimiento de los espacios públicos.
Mientras estamos ante una situación límite para el sector turístico, en Puerto de la Cruz nos ponemos un flotador y nos vamos a la fiesta al tiempo que duplicamos concejalías como la de Turismo, teniendo un responsable de promoción turística y una responsable de políticas turísticas sin competencia alguna ya que en política turística no tenemos margen de maniobra en los municipios y que en el pasado pleno del mes de agosto afirmaba que no le preocupaba la situación del turismo ya que hablando con un Touroperador, éste le aseguraba que no tenía motivos de preocupación porque tenían fortaleza suficiente para afrontar la situación. No entendía la Concejala que efectivamente cada touroperador tiene su volumen de negocio diversificado y que si un destino falla, puede apoyarse en el resto si ha sido previsor y ha apuntalado las alternativas, pero que esta realidad empresarial no es extrapolable a ningún destino, y tampoco a Puerto de la Cruz que está, como todos, a merced de las fluctuaciones del mercado turístico y a los condicionantes económicos y políticos del entorno, como estamos viendo en esta jornada.
Sin duda despertamos en lo que es un verdadero lunes negro para el Turismo en Canarias y en Puerto de la Cruz, y ante el que los gobiernos socialistas con sus socios, nada parecen tener que decir y nada parecen tener la intención de hacer, y valga lo dicho tanto para el Gobierno de Canarias como para el Cabildo Insular, pero también para el Ayuntamiento de Puerto de la Cruz. Estamos a la deriva de la incapacidad y la inacción y a merced de la tempestad perfecta a la que se enfrenta el sector turístico en Canarias.
Esperando acciones y reacciones seguiremos mirando con espanto y dolor como se viene abajo el castillo de nuestra economía, también de la local.