18.09.2018. Redacción | Opinión
Por: Paco Pérez
pacopego@hotmail.com
El actual entrenador del C.D. Tenerife, Joseba Etxeberría tenía los días contados al frente de la plantilla del club, aunque muchos pensábamos que continuaría si el equipo representativo pudiese ganar en el próximo partido, frente al Córdoba en el "Nuevo Arcángel" de aquella ciudad andaluza.
El Consejo de Administración de la entidad deportiva y, en particular su presidente y máximo accionista, Miguel Concepción, está preocupado por la actual situación clasificatoria del Tete, en puesto de descenso a Segunda "B" y ha cesado al técnico vasco. No ha tenido tanta paciencia como tuvo el pasado año con el anterior técnico, el balear José Luis Martí, que fue destituido ya muy avanzada la Liga, nada menos que en la vigésimo quinta jornada, cuando ya era casi imposible una reacción, como así fue.
Etxeberría, en la campaña precedente, devolvió la ilusión al equipo cuando cogió las riendas del vestuario blanquiazul, pero lo cierto es que hubo muchas dudas a la hora de renovarle el contrato, porque los resultados de los últimos partidos de la temporada 17/18 no convencieron a nadie.
De hecho, este año es el peor inicio de una temporada desde el año 2013, y con solo tres puntos, el Tenerife ocupa ya una plaza de descenso directo, después de haberse disputado cinco choques, con dos derrotas, tres empates y ninguna victoria. Es de destacar que en los últimos catorce enfrentamientos con equipos rivales, el equipo blanquiazul sólo ha conseguido un triunfo.
Este lunes, tras la injusta y desagradable derrota del pasado sábado ante el Reus, Etxeberría ha sido cesado de manera fulminante y no continuará como entrenador del Tenerife, para evitar, sobre todo, que se repitan los fallos y errores cometidos con José Luis Martí, porque entonces se esperó demasiado a una reacción del equipo que nunca llegó.
La estancia de los técnicos en los banquillos depende de si el balón entra o no entra en la portería contraria. Y la suerte no ha acompañado hasta ahora a los futbolistas del club isleño, y ninguno de los fichajes "estrella" de este año (Naranjo, Nano...) han visto puerta, por lo que el presidente también debería cuestionar la continuidad de Alfonso Serrano como secretario técnico, importador de falsas ilusiones...
Como es bien sabido, los entrenadores dependen de los resultados y el Tenerife no ha ganado ninguno de los seis encuentros que ha disputado y además fue eliminado de la Copa del Rey. El fútbol es así de cruel.