21.08.2023 | Redacción | Relato
Por: Inmaculada Fuentes Ballesteros
Escritora Valenciana
Hay vidas entrelazadas desde antes de que ellas mismas lo supieran.
Nacieron a la vez, al mismo tiempo, en el mismo lugar y con un mismo destino.
Germinaron sin saberlo para unirse.
Afloraron; al crecer se encontraron y jamás se separaron.
Hay vidas destinadas a vivirse unidas.
Brotaron juntas..., maduraron juntas..., se formaron juntas.
Una fue el sustento de la otra.
Se apoyaron, se sostuvieron, se abrazaron, se complementaron..., adaptaron sus formas y se fundieron en una sola.
Hay vidas que no existirían la una sin la otra.
Sus raíces se fortalecieron después de las tempestades para agarrarse mejor.
Sus troncos se reforzaron unidos para soportar los envites de la realidad.
Sus brazos se robustecieron para sostener los mejores frutos.
Sus copas se vigorizaron para mostrar su esplendor.
Hay vidas que unidas suman el doble..., aportan el doble..., se disfrutan el doble.
Hay vidas destinadas a vivirse entrelazadas.