Reconociendo a los mitos...Hércules y la Hidra

07.07.2024 | Redacción | Escrito

Por: Pilar Medina Rayo

La escultura que nos ocupa, se encuentra situada en la parte superior de una de las fuentes del Palacio de Aranjuez.

Representa uno de los doce trabajos de Hércules, en concreto el segundo.

Estos trabajos representan un conjunto de tareas que fueron cumplidas por el héroe en 12 años de servicio al rey Euristeo.

Sabemos que es Hércules por los atributos que porta: la maza (o clava) que simboliza su extraordinaria fuerza, y una piel de león (podemos observar la cabeza del felino sobre la suya propia). Cómo curiosidad, decir que a Hércules se le representa totalmente desnudo, valga de ejemplo el maravilloso cuadro de Zurbarán, pero el hecho de que aquí le veamos cubierto con la piel de león es indicativo de que ya ha cumplido con el primero de sus doce trabajos: dar muerte al león de Nemea. Por tanto, podemos distinguir, cuando veamos una obra que represente a Hércules, sobre si ha comenzado o no sus trabajos, en función de si se le representa con o sin la piel del león.

Junto al semi dios se encuentra un monstruo de varias cabezas, se trata de la Hidra de Lerma.

La Hidra era un monstruo de siete cabezas que moraba en las profundidades del lago Lerna, cerca de Nauplia, en el golfo de la Argólida. Habitaba en el lago como guardiana de una de las puertas del inframundo. Tenía forma de serpiente y de la respiración de sus siete cabezas salía un vapor venenoso.

Si lo anterior no era suficiente dificultad para cumplir la encomienda, hay que añadir, además, que por cada cabeza que Hércules cortaba a la Hidra, ésta tenía la virtud de regenerar otras dos nuevas cabezas que ocupaban su lugar...

La solución vino de la inspiración de Atenea y la ayuda de su sobrino, así mientras Hércules le cortaba una cabeza, su sobrino la sellaba con el fuego de una antorcha, impidiendo así que brotasen más cabezas...

Cuando cortó la última cabeza de la hidra, la enterró bajo una gran roca en el camino sagrado entre Lerna y Eleunte. Por último, mojó sus flechas en la sangre venenosa de la Hidra duplicando así la letalidad de éstas.

Suscríbete a nuestro Podcast



Buscar en Tagoror