30.05.2021 | Los Llanos de Aridane
Ayer sábado, último día del festival de Ilustración “Bolboreta”, organizado por el Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, a través de las Concejalías de Cultura con Charo González al frente y Elena Pais, responsable del área de Igualdad del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane. Por la mañana tuvo lugar la primera de las mesas de ilustradoras, bajo el título "Del papel al muro y algo más", moderada por Sara Fratini, con María Hesse, Sandra Gobet y Marta Roca.
En ella debatieron sobre cómo la ilustración puede salir del papel y llegar a los muros o a la propia piel, verdaderas galerías al aire libre en ambos casos.
"Yo plasmo mundos oníricos e introspectivos, que es lo que más me interesa, y me encanta tener que adaptarme al tiempo y a la superficie No suelo pensar en dar un mensaje determinado en ellos, aunque al final siempre queda plasmada en mi obra esa sensación de que nada es lo que parece" dijo Sandra Gobet.
"Cuando tatúo, es apasionante tener un lienzo que se mueve llevando tu obra con él. Cuando pinto muros, a pesar de llevar una idea preconcebida, siempre termino improvisando sobre la marcha. Mi trabajo, al final, es muy intuitivo e íntimo", destacó Marta Roca.
"Con las paredes nunca he sufrido bloqueos a la hora de pintar, quizás porque no he tenido tantas como desearía. Mis bocetos son estructuras sencillas, así que cuando comienzo a pintar, fluyo y me dejo llevar por lo que la pared me va pidiendo. Con una premisa: la reivindicación feminista siempre está presente en mi trabajo", dijo María Hesse.
Por la tarde, el primero de los coloquios ilustrados corrió a cargo de Moderna de Pueblo: "De pueblos, capullos y coños".
Raquel Córcoles-Moderna de Pueblo habló de sus comienzos del mundo de la publicidad, y de cómo entró en el mundo de la ilustración a través de una beca de cómic, cuyo premio era la edición de un libro. "Para mi carrera como ilustradora fue crucial conocer una red de mujeres, entre las que me sentí muy apoyadas: escritoras, fotógrafas u otras ilustradoras. Si hubiera estado sola o hubiera seguido intentando amoldarme a lo que querían de mí, posiblemente no hubiera continuado en este mundo o habría supuesto un fracaso".
Su libro "Idiotizadas" fue el cómic más vendido en España, justo en un momento de sororidad y despertar feminista, "Ya éramos ilustradoras que comenzábamos a tener éxito en redes y, a fin de cuentas, todo el mundo necesita reconocimiento para seguir creciendo", expresó.
A continuación, el Coloquio Ilustrado tuvo como protagonista a María Hesse, con "Flores, mujeres y placer". María se considera ilustradora desde que era pequeña: "Estuve mucho tiempo trabajando con técnica digital, hasta que volví a la tradicional. Me di cuenta de que la ilustración en España estaba cambiando, y que la ilustración femenina en particular comenzaba a explorar el mundo de los cómics para adultos. Las redes sociales abrieron infinitas posibilidades, viéndonos por fin representadas", dijo.
Un punto de inflexión en su recorrido fue ponerse las gafas violetas del feminismo: "Mis dibujos deben hablar también de lo que pasa por dentro, y lo hago a través de toda esa vegetación característica de mi obra, que va mutando y transformándose."
Posteriormente la primera mesa de ilustradoras trató sobre: "El proceso creativo. Claves, aciertos y los errores", y para terminar, la última mesa de ilustradoras habló sobre: "Construyendo tu propia voz". Ambas moderadas por Sara Fratini y con la participación de Moderna de Pueblo, María Hesse, Sandra Gobet, Quan Zhou y Marta Roca.
"Todo lo que me incómoda es un detonante para mi proceso", dijo Quan Zhou; "A veces creas por un impulso de algo que te enfurece", agregó Moderna de Pueblo.
"A veces me apetece dibujar sin un por qué, mientras que otras veces son procesos largos en los que sí hay un motivo. Al principio tienes a muchas ilustradoras como referentes, pero luego vas buscando tus referentes en otras partes", aclaró María Hesse.
"Al dedicarme al tatuaje, es importante escuchar a quien tienes delante, porque debes llegar a un trabajo consensuado", explicó Marta Roca. "Me gusta mucho la investigación de técnicas", finalizó Sandra Gobet.
Como resumen y colofón de unas jornadas que ya tienen la mirada puesta en 2022, las palabras de Sara Fratini: "Todas seguimos teniendo el síndrome de la impostora. Nunca nos parece que hacemos lo suficiente, ya que nos exigen justificar mucho más nuestro trabajo".
Finalmente, una reflexión colectiva a modo de conclusión de este primer festival lo sintetizaron con la siguiente frase: "Tenemos que creernos más nuestro trabajo, porque quizás seamos los referentes de mañana".
Imagen: Bolboreta | CEDIDA