12.10.2018. Santa Cruz de Tenerife
El tercer teniente de alcalde y concejal responsable del área municipal de Cultura, José Carlos Acha, inauguró en la tarde de ayer jueves, en la sala de arte Los Lavaderos, una exposición de pintura del artista Guillermo Vázquez Zamarbide que lleva por título ‘Eternidad del instante’. La muestra incluye óleos sobre lienzos de pequeño y mediano formato que, en su mayoría, han sido creados expresamente para esta ocasión. Esta iniciativa podrá ser visitada hasta el próximo 11 de noviembre.
Las obras se relacionan entre sí y ponen de manifiesto la importancia de experimentar el momento disolviendo el tiempo. El autor busca, mediante sus pinturas, evocar sentimientos que conduzcan a la introspección. En esta experiencia emocional, el espectador es también un creador capaz de movilizar sus percepciones para obtener una visión renovada de cada escena.
La trayectoria de Vázquez se basa en la búsqueda de imágenes y sentimientos dentro de su inconsciente. De este modo, la inspiración proviene de su engranaje interior. Enigmático y profundo, es su visión de un microcosmos donde cada instante puede conjurar un momento fundamental. En el lienzo se plasman metáforas reveladoras con el anhelo de hacer partícipe al observador de esta experiencia.
Guillermo Vázquez Zamarbide nació en Argentina, donde se formó como arquitecto y comenzó su trayectoria como artista, la cual desarrolla hasta la actualidad de forma continua. El proceso creativo lo inicia con bocetos y croquis realizados en acuarela para luego realizarlos en óleo.
Su condición de acuarelista de matriz influye, en gran medida, en su técnica para pintar al óleo. Desde el comienzo de sus obras la luz está presente, así como las veladuras y los colores rotos. Esto le permite transmitir emociones a través de la composición. La estrecha relación que mantiene Vázquez con el paisaje, como parte de su experiencia de vida, lo lleva lo lleva a hacer uso de metáforas que integran estas imágenes guardadas en su interior a la hora de expresarse. Mares, desiertos, oráculos y soles infinitos confieren a sus obras la atmósfera donde el refugio, la soledad, el desencuentro, la llegada y la despedida se hacen presentes.