09.09.2020 | Redacción | Poesía
Por: Jesús Lara González de Quevedo
Como quieres que mi alma,
deje de llorar por un instante.
Si tu ausencia me ha robado la calma
Y mi corazón no puede olvidarte.
Como quieres que no te inmortalice,
si cierro los ojos y te recuerdo sonriendo,
esperando a ver ¿qué es lo que me dices?
mientras mi respiración se acaba perdiendo.
Me falta cada beso, cada te quiero, cada aliento,
envuelto en una soledad inquietante,
llorando ante tu ausencia me siento.
Revolviendo mi imaginación hacia todas partes.
Dicen que todo pasa y que la vida sigue sin parar,
pero vuelven a ser palabras vacías en un rincón,
sujetas a cada situación desconcertada junto al mar,
con los ojos cerrados, escuchando una dulce canción.
Allá donde estés quiero que sonrías
como tú mi amor solo lo hacías,
para que cuando mire a una estrella brillando,
pueda ver que todos estos versos, lo estas escuchando.