22.03.2025 | Redacción | Opinión
Por: Rafael J. Lutzardo Hernández
Otra nueva derrota de nuestro representativo ante el Racing de Santander, un verdadero robo arbitral, prácticamente le dice adiós a la categoría de plata. Sinceramente, nos quedamos sin ver Fútbol en la isla de Tenerife. No descubro nada nuevo, si digo que la Primera Federación es una categoría dura, donde el balón está más en el aire que sobre el terreno de juego. De la misma manera, la lejanía de esos campos de Fútbol será otro factor condicionante para nuestro representativo. En fin, un coste económico que deber afrontar la nueva directiva por esos campos de Fútbol de Dios.
Sin duda, un tal Garrido, junto con su equipo de confianza, han matado la historia, el honor, el escudo y la camiseta del CD Tenerife. Reconozco que ya es tarde para hablar o escribir ¿el porqué sucedió todo esto?, pero lo cierto es que así fue. El representativo es algo más que un club. ¿Cuántas personas se quedarán sin trabajo? Lo mimo sucede con los negocios que están en las inmediaciones del Estadio Heliodoro Rodríguez López; los cuales verán diezmadas sus ventas. Se acabaron los llaveros, gorras, viseras del conjunto chicarrero.
Reconozco que comenzar un nuevo proyecto deportivo no es tarea fácil, sobre todo cuando el primer equipo tiene un filial y una serie de juveniles, infantiles, cadetes y alevines y de chicas. De la misma manera, unas instalaciones deportivas como la Ciudad Deportiva Javier Pérez. ¿Qué será de todo ello? El tiempo será el mejor complemento para ver como será el futuro del CD Tenerife dentro de unos años.
Mientras tanto, entiendo que es ahora cuando debemos de ayudar. Es decir, acudir al Estadio Heliodoro Rodríguez López como abonados del representativo. Apoyar en cada jornada a nuestros jugadores canteranos, junto al entrenador que la nueva directiva crea más conveniente. Ojala que sea Leandro Cabrera, 'Mazinho'. Nuestro estadio debe ser una especie de Bombonera, al estilo argentino.
Por lo tanto, con la pena en el alma, me despido esta semana de todos ustedes con la ilusión de ver nuevamente en un futuro no muy lejano al club tinerfeño en la actual categoría. Es decir, en la Segunda A.