18.05.2020 | Entrevista | Isabel Aguilar
Por: Paco Pérez
pacopego@hotmail.com
Después de más de cuarenta días de confinamiento provocado por el coronavirus y tras el decreto del Estado de Alarma, hacemos un repaso con Isabel Aguilar, jurista y experta en gestión sanitaria de estos días de duro aislamiento y le preguntamos cómo observa por dónde podrían ir los pasos de nuestro Sistema Sanitario en general y en lo particular, la asistencia a poblaciones de riesgo como los afectados en Salud Mental, en particular, tras el comienzo del Plan de desescalada.
¿Sanidad Pública o Sanidad Privada? ¿Ves óptimo que en nuestro Sistema Sanitario tenga una intervención tan importante del Sistema Privado? ¿Por qué crees que ha tenido tanto debate?
Entiendo que tu pregunta es referida a los modelos de gestión PPP (participación público privada), tuvo mucho eco y levantó debate sobre todo en la última grave crisis socioeconómica.
Considero que la sanidad privada puede tener su claro espacio en la política que persigue, en su objeto social por el que ha nacido como mercantil. Esto es, dentro de su marco normativo y su lugar de mercado. En lo que respecta a la Sanidad Pública, quienes tomen las decisiones de ésta, sus gestores, ya que gestionar no es otra cosa que decidir, debe ser público, pertenecer a ella y la infraestructura hospitalaria debe ser igualmente pública.
Ahora bien, esto no debe ser obstáculo para que la Sanidad Pública, de acuerdo la normativa vigente, pueda invitar a la colaboración o participación a mercantiles que operan dentro del sector salud, e incluso en el marco de proyectos de gran ambición dentro de distintos ámbitos, por ejemplo, de la investigación y en otras áreas, en el marco de otros contratos y programas. Eso sí, al amparo de una normativa que conlleve importantes criterios de transparencias entre sectores. Considero que el ciudadano lo que viene a condenar no es tanto las distintas figuras o modelos de gestión sino los comportamientos inmorales en las relaciones público-privadas, cuando están al margen de la ley y máxime cuando están vinculados a algo tan preciado como la salud.
Además, la parte privada sale ganando, ya que someterse a unas normas o criterios de transparencias y de fiscalización siempre dan seguridad jurídica. En mi modesta opinión, es síntoma de inteligencia quien se gana ante la sociedad de esta manera la confianza y el prestigio, esa su marca y su publicidad, el mejor marketing dentro del sector salud.
En numerosas ocasiones se ha dicho que poseemos el mejor sistema sanitario del mundo, pero ¿no han salido a relucir nuestras debilidades en demasía en esta pandemia para ser el mejor o de los mejores?
Claramente, ha sonado muchas veces, pero considero que se ha quedado en una frase hecha. Cuando alguna vez he escuchado esto, pienso que tenemos el mejor sistema del mundo, pero en trasplantes o en agudos, pero me surge la siguiente duda referido a trasplantes ¿cuántos se pudieron haber evitado con un buen sistema de prevención y no haber hecho llegar al paciente a ese estadio?
No cabe duda, que en esta pandemia no han salido favorecidos los enfermos crónicos. En mi humilde opinión, no sólo se han visto sus debilidades (en Salud Mental, diabetes, adicciones) sino que el hecho de haber cedido ante la prioridad que había por el virus es probable que origine consecuencias. Esta situación se podrá observar en el incremento de las listas de espera en estas patologías y el gasto farmacéutico también será un indicador de esta situación.
Considero, que se habrá de tomar buena nota acerca de estas situaciones e indicadores y tal vez, reconocer que hay que apostar por un fuerte impulso en prevención y Salud Pública.
En cuanto a la organización del sistema asistencial ¿no crees que se ha invertido más en los grandes complejos hospitalarios frente al Centro de Salud o a lo que implica el Médico de Familia de toda la vida y se ha burocratizado en demasía?
Probablemente el ciudadano tenga esa percepción y que su centro de confianza, que su médico o su ATS de siempre están bajo mínimos y que su forma de trabajar es lamentablemente haciendo un esfuerzo casi constante por sobreadaptarse a los escasos recursos y a un desproporcionado grado de burocratización.
Puede que haya llegado el momento en que haya que plantearse otra forma de gestionar Atención Primaria. En otros países con cobertura Universal y asistencia sanitaria pública, el Médico de Familia es quien gestiona su propia consulta o ambulatorio; Tal vez, se debería observar estas situaciones y evaluar si algunas de estas particularidades se podrían adaptar a nuestra realidad, eso sí, sin perder la visión de conjunto y la importancia de los equipos multidisplinares.
Grosso Modo ¿cuáles crees que deberían ser las cuatro áreas prioritarias en las que debería invertir el gobierno para iniciar la reactivación del Sistema Sanitario?
Desde luego, en prevención y en dar un gran impulso a la educación para la salud, que como sabemos es una actividad básica en Pediatría Social y, por supuesto la Enfermería escolar. Se hace necesaria, en mi modesta opinión, la herramienta de la educación sanitaria para la promoción de las cualidades que definen la salud y la prevención de la enfermedad. Considero que se debería hacer un ejercicio de suma responsabilidad para que el ser humano desde la edad más temprana vaya tomando conciencia de los factores sanitarios y no sanitarios que influyen en nuestra salud. Además, se debería invertir de manera clara en Salud Pública, dedicando especial atención a la importancia que ha de tener el patrón de conducta individual en la mejor salud comunitaria. Un patrón de conducta que será decisiva en la próxima etapa a corto y medio plazo.
En cuanto a la asistencia de las personas en situación de dependencia considero se debería observar tal vez, un nuevo diseño que venga unir lo social con lo sanitario y poner énfasis en la gestión de la misma, sus medidas fiscalización, seguimiento e incorporación de la familia
En crónicos, como en Salud Mental habrá que observar los padecimientos de trastornos mentales cronificados, la diabetes y otras patologías, como digo cronificadas.
Cuéntanos, como presidenta de la Fundación Juana Reyes ¿Cómo observas de manera concreta la situación de personas afectadas en Salud Mental tras esta crisis?
Desde nuestra Fundación observamos que se dan las siguientes situaciones: Estrés laboral en profesionales que han tenido contacto con personas afectadas por el virus o sus familiares; Familiares de víctimas fallecidas que presentes cuadros de melancolía, tristeza o inclusive trastorno de estrés postraumático por no haberse podido despedir de su familiar afectado; Personas que presenten cuadros de ansiedad, angustia provocado por la incertidumbre socioeconómica; Personas con padecimiento de trastornos mentales, unidos o no a una adicción (patología dual) y que hayan visto una descompensación o recaída en su tratamiento y población en general que somatice. Estas situaciones así observadas se las hemos trasladado al Ministerio al tiempo que hemos solicitado información acerca de las medidas y/ o planificación, como síntoma de nuestra preocupación, sobre el trabajo que realiza en el camino hacia la nueva normalidad dentro de este ámbito y, por supuesto, nuestro ofrecimiento en contribuir, para la cooperación en el diseño y estudio del mismo y/o plan de seguimiento, en su caso.
¿Crees que habrá un salto cualitativo en la gestión y atención a la Salud Mental? Permíteme señalar, que tal y como manifiesta la OMS “La salud mental es un estado de bienestar en el que la persona realiza sus capacidades y es capaz de hacer frente al estrés normal de la vida, de trabajar de forma productiva y de contribuir a su comunidad”. En mi humilde consideración, a veces, no se ha tenido en cuenta el impacto que tiene en nuestra cotidianidad a todos los niveles hasta que no observamos que alguien muy cercano tiene un trastorno mental grave o su salud mental ha sido afectada de una forma severa. El mismo legislador, en cambio sí lo ha tenido en consideración, sucede que, insisto no cobra aún hoy interés mayoritario en la ciudadanía. Podríamos citar algunos ejemplos que nos llevan incluso a hablar de urbanismo saludable. Es posible la planificación urbanística aunando el desarrollo sostenible y la prevención de la salud de la colectividad. Cabe recordar que el legislador ya se encarga de definir la evaluación del impacto en salud. Es de reseñar los ejemplos de la ley de Salud Andaluza y lo que significó la Evaluación del Impacto en Salud del Plan de Reforma Integral de Uretamendi-Betolaza y Circunvalación del Gobierno Vasco, (experiencia piloto, año 2009). Son claros indicadores de herramientas y métodos y procedimientos no provenientes de nuestros Sistema Asistencial Sanitario influyen en salud mental y, que debería en mi opinión también ser trasladadas a la generalidad.
A todo esto, habrá que añadir el impacto del ruido, la importancia de los lugares de ocio, el esparcimiento, la luz y la goestrategia en los parques y zonas verdes, con clara incidencia en la salud mental. De esta manera, creo que podemos reafirmar en que está vinculada con claridad (la salud mental) al bienestar del ser humano y va mucho más allá de un factor de asistencia médica, siendo ésta igualmente imprescindible.
Siguiendo con otros grupos vulnerables ¿Cuál sería el gran reto de las Drogodependencias?
La asistencia a las Drogodependencias es hoy todavía, sobre todo en su vertiente extrahospitalaria, un reto. En muchas Comunidades Autónomas sus servicios extrahospitalarios son gestionados y asistidos (el paciente) a través. Entidades sin ánimo de lucro, a través de políticas de subvenciones.
En mi opinión, algunas debieron haber decidido la integración su Sistema Público Autonómico y no estar sometidas a estas políticas (de subvenciones) _siendo conscientes de la implicación de diferentes agentes sociales_. El resultado tal vez, hubiera traído la equiparación en calidad asistencial en todo el territorio español o, en su mayor parte, que en definitiva es lo que de esta parte del sector el paciente busca. Canarias, por ejemplo, previo a la crisis del año 2010, pudo haber apostado de acuerdo a la ficha financiera de aquél entonces y haber llevado a cabo esta integración escogiendo criterios del modelo de integración valenciano, haciendo valer éstos a la realidad de un territorio fragmentado y a otras particularidades, sus distintas administraciones y el peso a distintos niveles de los Cabildos Insulares. Creo firmemente en la cooperación entre los distintos Sistemas Públicos de Salud para potenciar, diseñar y pensar en que todas formamos “uno”, un solo Sistema.
Usted que en su momento vivió una etapa activista, de 2000 a 2010 coliderando una plataforma como familiar afectada por una gestión inadecuada de un Centro de Atención a personas dependientes ¿Cree que se tomará conciencia después de observar su situación y se creará un nuevo paradigma?
En mi opinión, se debería observar de una manera decidida otros modelos, como pudiera ser el residencial sueco. En éste se huye en su diseño residencial y en su atención de lo institucional y se centra claramente en la persona. La convivencia cuida que sea claramente personalizada y suele ir desde residir en módulos de ocho o doce residentes y sus auxiliares respectivos hasta “¿A qué hora le parece bien el baño?”. Pudieran tal vez generar una mayor calidad asistencial. Habrá que plantearse si algo de esta realidad se puede trasladar a la nuestra
Y, por supuesto, el empoderamiento del mayor. Desde que integraba esta plataforma me preguntaba que era precisamente mi generación la que tenía que liderar hecho. Sería ilógico pedirle a un señor octogenario que entra en una residencia en estos momentos que ahora comience a hacerlo. Por tanto, es la generación joven, que ya no vuelve a la niñez, la que tiene que demandar de qué forma quiere vivir su etapa adulta más avanzada o su longevidad. Hoy, si me permites decir, la etapa de la niñez está claramente protegida no sólo jurídicamente si no a todos los niveles. Sin embargo, encuentro desproporcionado la protección en que se hallan ambos grupos, niñez y un adulto longevo con la esperanza de vida que acontece en nuestra sociedad. ambos padecieren cuadros de pluripatologías, se podría dar el caso que al menor se le sobreprotege mientras al mayor se le deja abandona. Es corresponsabilidad de las generaciones más jóvenes no abandonarles y de manera inteligente luchar para en su momento no ser víctimas de esta injusticia social.