02.02.2018. Las Palmas de Gran Canaria
Los equipos de emergencia vigilarán toda la noche la zona en la que se ha producido un derrumbe esta mañana, en el Paseo Hermanos Jorge Marrero, entre La Puntilla y El Confital, donde mañana se iniciarán ya los trabajos para estabilizar el talud afectado, colocar una malla y poder luego, con más garantías, comenzar el desescombro del material caído en el desprendimiento, unos 400 metros cúbicos de tierra y piedras.
Para poder hacer frente a estos trabajos, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través de la Sociedad Municipal de Gestión Urbanística (GEURSA), ha contratado ya a una empresa especializada. Esta misma tarde, operarios de la empresa contratada han perimetrado la zona en la que van a actuar y mañana un equipo de especialistas en trabajos verticales comenzarán a trabajar en la estabilización del talud y colocación de una malla. Es el paso previo para luego comenzar, ya con mayor seguridad, a retirar el material caído.
Un retén formado por efectivos de la Policía Local, de Bomberos y con apoyo de la Policía Nacional, se mantendrá en la zona en las próximas horas para vigilar que no se producen mayores incidencias, una vez que ya a lo largo del día se ha podido hacer una primera revisión en la zona, que ha señalado que no hay peligro ni para las viviendas ni para el propio paseo, puesto que la roca sólida sobre la que están ubicados no se ha visto afectada.
El Ayuntamiento mantiene desde el momento en que se produjo el suceso, en torno a las 08.00 horas, un amplio dispositivo de seguridad coordinado desde el Centro Municipal de Seguridad y Emergencias. Además, técnicos de Urbanismo han realizado los trabajos previos para confirmar, en primer lugar, la seguridad de la zona y para definir después que trabajos deben hacerse para desescombrar la zona y así poder asegurar definitivamente que ninguna persona se ha visto afectada.
El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, que esta mañana ha permanecido en la zona junto a varios concejales para supervisar el operativo, ha confirmado que tras un primer reconocimiento, estos equipos han podido descartar inicialmente que bajo los escombros pueda haber alguna persona. En concreto, se han realizado rastreos con perros adiestrados de la Policía Local y de la Policía Nacional que han permitido contrastar, al menos de momento, que no había ninguna persona en el área sobre la que han caído las piedras y la tierra.
En esa zona pernoctan algunas personas sin recursos, pero todas las que estaban identificadas por los servicios sociales municipales están ya localizadas en la propia ciudad o hay constancia de que han salido de la Isla. No obstante, se va a seguir trabajando en la zona para descartar definitivamente que alguna persona haya podido quedar bajo los escombros.
Los trabajos de desescombro que se van a realizar pueden alargarse, debido a la complejidad del terreno, las mareas y el volumen de piedras y tierra a retirar.